Dormir bien
Las horas de sueño son esenciales para poder cargar pilas. Pero no solo se trata de dormir bien, sino de tener un sueño reparador. Para ello deben ser horas de sueño tranquilas, sin pesadillas, y seguidas. Por ejemplo, si se logra dormir pero la persona se despierta horas antes de su hora real de levantarse, o si se despierta varias veces durante la noche, el sueño no será igual de reparador. Las consecuencias al no dormir bien pueden ser muy variadas: estrés, ansiedad, cansancio, somnolencia y cansancio durante el día, poca capacidad para concentrarse, lentitud de respuesta, falta de reflejos, etc. Con relación a cuándo se debe dormir, si bien es cierto, que debe ser siempre a la misma hora, y que debe ser por la noche, los científicos y médicos cada vez están más de acuerdo en aconsejar una pequeña siesta para reactivar nuestro organismo y nuestro cerebro. Eso sí, la siesta (en adultos) debe estar en torno a la media hora.