Guillermina Cabañas
La historia cuenta que la muerte de Cabañas tuvo lugar en 1974, en la selva cafetalera El Otatal, municipio de Tecpan de Galeana en Guerrero, cuando el Ejército mexicano lo cercó, a él a y a un grupo de compañeros de lucha. Familiares que le sobreviven han denunciado que durante los años de Guerra Sucia, el gobierno promovió la desaparición de aproximadamente 650 personas sólo en Guerrero. De éstos, 126 formaban parte de la familia Cabañas.