518. Diana Krall. Amar mientras se canta.
Ella creció escuchando standards. Y ahora, cuando tiene que elegir un tema para cantarlo, escoge exactamente el que le gusta. El que le dé más libertad para hacer su canción.
Contar historias, eso es lo que hace. Sí: es Diana Krall quien narra las historias, pero su piano y su garganta se encargan de desnudar a los protagonistas. Las interpretaciones que hace sirven de marco perfecto a un estilo vocal romántico, así como para su habilidad consumada al agregar un giro fresco a baladas de jazz probadas por el tiempo. Su fraseo impecable y poderoso dominio de los matices, en combinación con la claridad de su obra pianística y las ejecuciones notables de sus acompañantes, otorgan a todas las canciones un sonido instrumental pleno y un fuerte swing.