Capítulo 3. Para fandango, zapateo y son
Sumarse al fandango es cuestión de animarse a bailar huapango o tocar al ritmo de los sones tradicionales como La bamba, La zapateada y Colas. Los abuelos y abuelas recomiendan un ritmo pausado para conseguir bailar y tocar el fandango en veneración al santo durante todas las noches que dura la mayordomía.
Si el mayordomo invita a los músicos y danzantes como un binomio que acompaña al santo a manera de servicio durante la velada; hombres y mujeres comparten el ánimo y respeto por bailar ataviados en zapatos de tacón, pantalón con camisa y vestido de holanes. Es momento de escuchar las jaranas y que cobre sentido el subir a la tarima para zapatear.