“Silence is Golden” es uno de sus mantras y el título de una de sus muestras plásticas más célebres, realizada a base de esferas de cristal que contienen y definen tal elemento como imprescindible para el conocimiento personal. El ruido, a su vez, es el que le ha proporcionado la perturbación, ese inquietante estado que le ha atraído el sello de originalidad a su obra. Lynch empezó a conocer y a entender el mundo a través del sonido, de la música. La cual ha canalizado a través de videos, soundtracks y discos propios.