Las Reinas Chulas han abrevado de la historia nacional y del acontecer político contemporáneo para, a través del humor, denunciar la corrupción, impunidad, discriminación y machismo presentes en nuestra sociedad.
En 2005 cuando Las Reinas Chulas se hicieron cargo del teatro-bar El Hábito, al que rebautizaron como El Vicio. Aquél había sido fundado en 1990 por la dramaturga, actriz y activista social Jesusa Rodríguez y por la actriz y cantante Liliana Felipe. Dentro y fuera de su espacio cabaretero, Las Reinas Chulas se han distinguido por defender, entre otras causas, el feminismo, el aborto, los derechos de la comunidad LGBTI, la libertad de expresión y de reivindicar el derecho al placer.
Las Reinas Chulas han abrevado de la historia nacional y del acontecer político contemporáneo para, a través del humor, denunciar la corrupción, impunidad, discriminación y machismo presentes en nuestra sociedad.