Etta James tenía tanta fuerza y era tan sincera como cantante de blues como de soul, aunque fue en el rhythm and blues en el que destacó sobremanera, y con el cual se mantuvo en el mundo de la música por casi cinco décadas. Ella fue la artista del sello Chess que más éxitos consiguió y quizá la que sostuvo a la compañia con sus beneficios. De 1960 a 1969 obtuvo 21 hits seguidos en las listas de popularidad. El grosor de sus audiencias aumentaba con cada uno de ellos y los mejores compositores del momento la buscaron para que interpretara sus canciones. La canción “At last!”, una joya dentro de la balada, la eternizó por siempre. Su versión de ella ha sido insuperable.